Las películas dicroicas aparecen en distintos colores según el ángulo de visión. Por ejemplo, si pasa por delante de un escaparate cubierto con una lámina adhesiva iridiscente, verá la misma superficie en distintos colores. Se trata de un efecto bastante espectacular, por lo que es ideal para cualquier cosa que deba llamar la atención. Por ejemplo, puede utilizar un plotter de corte (con una cuchilla tangencial a 60°) para trazar motivos o letras a partir de la lámina y aplicarlos a la superficie que desee.

Lo importante con el film de poliéster es que sólo debe aplicarse sobre superficies lisas, firmes y uniformes, y que es mejor aplicarlo en seco porque el material no es especialmente transpirable. Para decirlo más claramente: si desea aplicarlo en húmedo, debe asegurarse de limpiar cuidadosamente el agua con una escobilla de goma después de colocarlo. Esto funciona especialmente bien en superficies muy lisas, como el cristal. Sin embargo, el agua que queda entre la lámina y el cristal apenas se evapora porque apenas puede difundirse a través de la lámina. Así que hay que trabajar con mucho cuidado. El agua con un líquido de transferencia funciona mejor que el agua pura. El cristal acrílico sólo debe cubrirse si es un material templado. El vidrio acrílico no templado tiende a desprender gases cuando cambia la temperatura ambiente (cuando se calienta). Como la película no está abierta a la difusión, en este caso se formarán burbujas de gas bajo la película.

La lámina opaca es extraordinariamente resistente y, por tanto, muy fácil de pegar. Está disponible en cuatro variantes de color. Aslan denomina a estas variantes "Plasma", "Andrómeda", "Alfa" y "Aurora". Se refiere a los cambios de color de azul oscuro a verde (Plasma), de cobre a verde (Andrómeda), de magenta a amarillo (Alfa) y de rosa a azul claro (Aurora). Al pegar, asegúrate de que pegas las láminas una junto a otra en la misma dirección. De lo contrario, los cambios de color no serán homogéneos ni paralelos cuando se vean. Tampoco deben aplicarse en ángulos rectos entre sí, ya que ello alteraría gravemente el bello efecto visual de la lámina.